Propondrá a Randal Quarles como miembro de la junta de gobernadores y encargado de la regulación bancaria.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha iniciado el proceso de reorganización de la Reserva Federal (Fed), una de las instituciones más poderosas del país y hoy en el centro de las miradas de los mercados por su determinación en endurecer la política monetaria.

La junta de gobernadores de la Fed, formada por siete miembros, cuenta con tres vacantes y Trump propondrá a Randal Quarles, que trabajó en el Departamento del Tesoro a las órdenes de George W. Bush, para ocupar uno de esos asientos.

Quarles, gestor de fondos de inversión, se encargará también de la vigilancia de Wall Street, en pleno proceso de desregulación bancaria amparado por la nueva Administración americana.

Como miembro de la junta de gobernadores, Quarles tendrá voto en las decisiones de subida de tipos en las reuniones periódicas del banco central. Hasta ahora, ha sido crítico con la tardanza de la Fed en empezar a subir el precio del dinero, por lo que se espera que se mantendrá en la línea dura y apoyará nuevos incrementos de las tasas.

El equipo que dirige Janet Yellen ha aplicado hasta ahora dos subidas de tipos en lo que va de año y se espera que anuncie una más antes de que acabe 2017. Las tasas de encuentran ahora entre el 1% y el 1,25%.

Reemplazo de Yellen

Tras la propuesta de Quarles, la Casa Blanca sigue buscando dos gobernadores más para la Fed y, sobre todo, un posible reemplazo para Yellen, cuyo mandato vence en febrero de 2018, justo cuando se cumplirá el primer aniversario de Trump como presidente de Estados Unidos.

La máxima responsable de la Fed podría permanecer en el puesto durante otros cuatro años. Aunque la decisión que tomará el mandatario republicano es aún incierta, su permanencia parece improbable.

Por un lado, Trump ha asegurado que Yellen tendrá que irse puesto que "es demócrata". Por otro, en una entrevista con The Wall Street Journal, se mostró abierto a su renovación.

Casi al mismo tiempo que Yellen estaría prevista la salida del vicepresidente de la Fed, Stanley Fischer, que también asumió el cargo en 2014, nominado por el entonces presidente, Barack Obama. Yellen y Fischer lideran la junta de gobernadores de la Fed, el máximo órgano del banco central.

Está formado por siete gobernadores propuestos por el presidente y confirmados por el Senado durante un periodo máximo de catorce años. De entre ellos, el inquilino de la Casa Blanca también designa al presidente y al vicepresidente por cuatro años.

Ley Dodd-Frank

Cuando Trump asumió el poder de la primera potencia internacional, había dos vacantes en la junta cuyo hueco Obama intentó llenar sin éxito debido a la oposición de los republicanos. Desde que el magnate inmobiliario se convirtió en presidente, la Fed cuenta con una baja añadida.

Daniel Tarullo, uno de los miembros más moderados, anunció su retirada justo después de que Trump iniciara el desmantelamiento de la regulación el sector bancario, conocida como ley Dodd-Frank.

Tarullo fue uno de los representantes de la Reserva Federal que ayudó al equipo de Obama a poner en marcha la nueva regulación nacida al calor del colapso de Lehman Brothers. Su salida se hizo efectiva el 4 de abril.

Los puestos vacantes en la Fed, unidos a los finales de mandato previstos, crean un escenario casi inédito con el que Trump puede reforzar su poder.

El mandatario ha conseguido la difícil tarea de que Neil Gorsuch sea aprobado para el Tribunal Supremo, y la reorganización de la Fed es el próximo objetivo.

La estrategia monetaria es clave para un presidente que pretende impulsar el crecimiento económico y aprobar un agresivo plan de reforma fiscal.