El alcalde de Lleida, Àngel Ros, utilizó recursos del Ayuntamiento para celebraciones del PSC. El personal de su gabinete municipal organizó una comida de Navidad en la que únicamente participaron alcaldes de poblaciones socialistas.
El ágape tuvo lugar el 19 de diciembre de 2014 en el hotel Zenit y costó 652,48 euros. El Ayuntamiento de Lleida aprobó el gasto y autorizó su pago, según consta en una factura del Consistorio fechada a 31 de diciembre, firmada por la Asesora Técnica del Gabinete de Alcaldía de Lleida, Roser Xandri, y la entonces primera teniente de alcalde, Marta Camps, y a la que este diario ha tenido acceso. Sin embargo, un portavoz municipal atribuyó a un «error» que la factura recibiera el visto bueno de los responsables municipales y aseguró que «se anuló el apunte contable» y el pago nunca llegó a materializarse.
Esa factura, junto a muchos otros abonos realizados por el Consistorio, está siendo analizada por la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), pero el Ayuntamiento de Lleida se negó a confirmar si dio marcha atrás en el pago de la cena de Navidad a raíz de las pesquisas del ente fiscalizador. La investigación se puso en marcha después de que, antes de ser cesada por Ros, la ex primer teniente de alcalde, Marta Camps, decidiera denunciar éste y otros gastos a Antifraude y la Fiscalía Anticorrupción por considerarlos irregulares. Camps defiende que en su momento firmó la factura sin conocer su fin real, pues en ella sólo consta el genérico concepto «comida de navidad», sin aludir a que el banquete iba destinado a alcaldes del PSC de la demarcación de Lleida y no a personal del Consistorio. Asegura Camps que, al percatarse, decidió poner en conocimiento de Antifraude la organización del convite.
EL MUNDO también ha tenido acceso a la agenda interna de Ros que prueba cómo el personal de su gabinete municipal, contratado por el Ayuntamiento, se ocupó de organizar personalmente una celebración que corresponde al ámbito del PSC. En el documento, la Asesora Técnica del Gabinete de Alcaldía de Lleida, Roser Xandri, precisa a José Crespín -jefe de gabinete y yerno de Ros- que está prevista la asistencia de 34 alcaldes entre los que se encuentran los de poblaciones leridanas como Torres de Segre, Alcoletge o Térmens. El mismo portavoz del Consistorio justificó esta implicación de empleados municipales en la organización de la comida porque «puntualmente el personal de confianza del alcalde echa una mano en actos de partido de dimensión institucional».
El uso de recursos municipales para atender a asuntos del PSC está siendo doblemente estudiado por Antifrau, que también investiga las dietas de Ros. Tal y como reveló este periódico hace dos semanas, el alcalde de Lleida cobró dietas del Ayuntamiento por desplazamientos a Barcelona para asistir a reuniones del PSC, comidas con socialistas díscolos o sesiones del Parlament. Así lo certifican notas de gasto del alcalde y su agenda interna en la que no aparecían reflejadas las «gestiones municipales» que Ros aseguraba realizar en la capital catalana.
Dietas por decreto a un cargo fichado de UGT
La personalista interpretación y adaptación de la normativa municipal que la oposición y Marta Camps reprochan a Àngel Ros cuenta con un capítulo especial vinculado a uno de los últimos fichajes del alcalde de Lleida. Ros decretó el pago de dietas por desplazamientos a Rosa Palau, una ex sindicalista de UGT que el alcalde fichó como Comisionada de Alcaldía de Responsabilidad Social Corporativa. Esta figura no está recogida en el organigrama de personal de Lleida. Palau no es funcionaria, personal laboral, ni cargo de confianza. Sin embargo, cada mes el Ayuntamiento le paga los gastos por trasladarse desde su domicilio, situado en la población de Golmés, al Consistorio. Este diario ha accedido a las notas de gasto que acreditan los pagos. Antifrau estudia el controvertido decreto por el que Ros avaló el pasado 2 de mayo que Palau reciba «las indemnizaciones que le puedan corresponder por razón de los gastos efectivos que pueda tener». La cesada primer teniente de alcalde, Marta Camps, se negó a rubricar las notas de gasto de la ex sindicalista al entender que el decreto de Ros bordeaba la normativa municipal. Fue entonces cuando la que fue mano derecha del candidato del PSC a la Alcaldía de Lleida denunció la presunta irregularidad de estos pagos. Fuentes de la Alcaldía defienden la «legalidad» de las dietas pagadas a Palau y se escudan en la potestad de Ros para determinar su abono mediante decretos. Las mismas voces subrayan, además, que la comisionada no percibe un sueldo del Consistorio y que sus dietas por desplazamiento han supuesto un pequeño gasto para la Paeria. Desembolso que el Ayuntamiento cifra en 708 euros.
